Deja al niño que actúe, que curiosee, que salga a descubrir el mundo y tú solo amortigua los golpes, como cuando empezaba a caminar, recuerda cuando iba a caer, ¿Qué hacías?… y después lo levantabas para que continuara, ¿verdad?. Esta conducta deberá permanecer toda la vida infantil, adolescente y en la adultez inicial para que el humano la aprenda, automatice y la aplique durante toda su vida.
Actitudes del cuidador durante el acompañamiento de vida con sus seres queridos: empatía, Simpatía, optimismo, motivación, resiliencia, amor, seguridad, confianza, esperanza, gratitud, alegría, curiosidad y admiración.
Roberto Hernández.